Ravina Shamdasani, Portavoz del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos.
La oficina del Alto Comisionado subraya tras el ataque estadounidense a un barco en el sur del Caribe que el uso intencional de la fuerza letal por parte de los Estados al combatir el tráfico ilícito solo es permisible como medida de último recurso, cuando existe una amenaza inminente para la vida.
Fuente: Sección de Noticias ONU
Tras el ataque de #EstadosUnidos a un barco cerca de #Venezuela, @UNHumanRights señala que la respuesta al tráfico de drogas debe respetar el derecho internacional. “Las personas no deberían morir por usar, traficar o vender drogas”, subraya la portavoz. https://t.co/IKMg1nyeAK pic.twitter.com/7LYT68dhse
— Noticias ONU (@NoticiasONU) September 5, 2025
Redacción Exposición Mediática.- “Las personas no deberían ser asesinadas por usar, traficar o vender drogas” declaró este viernes la portavoz de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos al responder una pregunta sobre el ataque de Estados Unidos contra un barco frente a las costas de Venezuela.
Ravina Shamdasani enfatizó en su encuentro habitual con la prensa en Ginebra que es esencial que las respuestas de los Estados al tráfico ilícito de drogas respeten el derecho internacional de los derechos humanos.
Al combatir el tráfico ilícito, los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley deben respetar los principios básicos sobre el uso de la fuerza establecidos en el derecho internacional, añadió la portavoz, por lo que el uso intencional de la fuerza letal solo es permisible como medida de último recurso, cuando existe una amenaza inminente para la vida.
“Toda pérdida de vidas en el contexto de una operación de aplicación de la ley debe ser investigada de manera independiente, rápida y transparente”, aseveró Shamdasani.
Ataque a una embarcación en el sur del Caribe
La declaración de la portavoz se produce después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmara el pasado martes que las fuerzas armadas de su país habían llevado a cabo un ataque en el sur del Caribe contra un barco proveniente de Venezuela que, según su versión, transportaba drogas hacia Estados Unidos. En el ataque habrían muerto 11 personas.