Redacción Exposición Mediática.- definido como acto, la prostitución es la actividad mediante la cual una persona ofrece servicios sexuales a cambio de una compensación económica o material, generalmente de forma voluntaria y consensuada entre adultos.
Diferencias relacionadas
•Prostitución voluntaria: Trabajo sexual autónomo.
•Prostitución forzada: Explotación sexual — trata de personas.
•Proxenetismo: Cuando un tercero se beneficia económica o materialmente de la prostitución de otra persona.
En esencia, la prostitución es una práctica de intercambio económico por actividad sexual, no necesariamente ilegal, pero sí objeto de fuertes debates éticos, morales y jurídicos.
Origen de la idea: “el oficio más antiguo”
La frase “la prostitución es el oficio más antiguo del mundo” es una expresión popular sin base arqueológica exacta, pero apunta a una realidad histórica: la prostitución ha existido en prácticamente todas las sociedades conocidas.
Documentos de la antigua Mesopotamia, Grecia, Roma, India o China muestran que era una práctica socialmente tolerada, a menudo vinculada a cultos religiosos, servicios sexuales rituales, o a redes de burdeles estatales (Bullough & Bullough, 1987).
¿Es legal o ilegal?
Depende del país
La respuesta corta es: depende del marco legal de cada país. No existe un consenso global; en su lugar, hay modelos legales muy diversos, que suelen agruparse en 4 grandes categorías:
1.- Legal y regulada
En algunos países, la prostitución es legal y está sujeta a regulaciones estatales:
•Se permiten burdeles con licencia.
•Las trabajadoras sexuales pueden registrarse como autónomas o empleadas.
•Hay normas de salud, seguridad laboral y controles sanitarios.
Ejemplos: Países Bajos (Holanda), Alemania, Nueva Zelanda y algunos estados de Australia. En estos lugares, el enfoque es que la prostitución es una forma de trabajo sexual, por lo tanto, se legaliza para proteger derechos laborales y de salud pública.
2.- Parcialmente legal (modelo de despenalización o reglamentación limitada)
En muchos países, la prostitución no está prohibida como acto privado, pero sí se sancionan actividades conexas: proxenetismo, burdeles, trabajo callejero, publicidad sexual.
Ejemplos: España, México y algunos estados de EE. UU. (Nevada, por ejemplo, permite burdeles regulados; en la mayoría del país, la prostitución es ilegal). En estos contextos, la prostitución como intercambio entre adultos consensuado no se persigue penalmente, pero se combate la explotación y la trata.
3.- Prohibida penalmente
En otros países, la prostitución es ilegal: vender o comprar servicios sexuales, o ambos, es delito. La penalización puede centrarse en la persona que se prostituye, el cliente, o ambos.
Ejemplos: Irán, Arabia Saudita y varios países de tradición islámica, donde se castiga bajo leyes religiosas (sharía). En muchos de estos casos, la prostitución es fuertemente sancionada, a veces con penas corporales o de cárcel.
4.- Modelo abolicionista o “modelo nórdico”
Algunos países como Suecia, Noruega, Islandia y Canadá adoptan el llamado modelo nórdico: no penalizan a la persona que se prostituye, sino al cliente que paga. La idea es que la prostitución se considera una forma de violencia de género que debe erradicarse reduciendo la demanda.
Este modelo es polémico. Sus defensores argumentan que protege a las mujeres de la explotación. Sus críticos dicen que empuja la prostitución a la clandestinidad, dificultando la protección de derechos laborales y la salud de quienes ejercen el trabajo sexual.
Debates actuales
El debate sobre la legalidad de la prostitución combina factores morales, religiosos, económicos y feministas:
•Algunas corrientes feministas ven la prostitución como opresión estructural.
•Otras la reivindican como forma de autonomía sobre el propio cuerpo.
•Organizaciones de trabajadoras sexuales luchan por derechos laborales, protección contra la violencia y eliminación del estigma.
El consenso internacional actual (ONU, OIT, ONUSIDA) tiende a recomendar políticas que distingan entre trabajo sexual voluntario y trata de personas. La trata y la prostitución forzada son crímenes graves, mientras que la prostitución voluntaria, para muchos organismos, debería estar regulada para proteger la dignidad y la salud de quienes la ejercen.
Conclusión
No existe una respuesta única: la prostitución puede ser legal, ilegal, tolerada o regulada parcialmente, según la legislación, la cultura y el contexto moral de cada país. Es un fenómeno social complejo, cargado de tensiones éticas, económicas y de derechos humanos.
Entender su historia y su pluralidad legal permite discutirla sin simplificaciones: ni es “libre de problemas”, ni se resuelve solo con prohibiciones.
Bibliografía sugerida
•Bullough, V. L., & Bullough, B. (1987). Women and Prostitution: A Social History. Prometheus Books.
•Agustín, L. M. (2007). Sex at the Margins: Migration, Labour Markets and the Rescue Industry. Zed Books.
•Weitzer, R. (2012). Legalizing Prostitution: From Illicit Vice to Lawful Business. NYU Press.