Por Redacción 
Santiago de los Caballeros, R.D.- El Ministerio Público junto a la Policía Nacional, investigan las circunstancias en que una joven adolescente de 14 años, de origen haitiano, llevó y mostró un arma de fuego ante sus compañeros de clase en el Centro Educativo Salustina Bans Batista, en esta ciudad.
Según versiones del caso, la estudiante de nacionalidad haitiana llevó la ahora confiscada arma de fuego al referido centro de estudios en dos ocasiones seguidas, donde se supo eventualmente que la referida arma pertenecería alegadamente al padrastro de la menor.
La noticia se filtró públicamente tras una testigo ocular y presencial del hecho se lo confesó a progenitora y ésta última a una docente de la escuela.
La idea inicial era referir el caso a la psicóloga del centro, sin calcular la gravedad de una situación de tal magnitud. La psicóloga no fue al siguiente día del hecho y fue cuando nuevamente la adolescente mostró el artefacto e incluso, llegó a apuntar a la otra estudiante que delató la situación a su madre.
Entorno violento
La dirección del centro educativo manifestó que la menor no tenía antecedentes de conducta violenta y reconoció no tener control total sobre el accionar de la población estudiantil allí.
El gesto de “impresionar” a los demás por parte de la portadora del arma de fuego, tendría orígenes en un ambiente hogareño violento en el cual su padrastro (de origen haitiano también) le amenaza constantemente.
Entrega del arma y advertencia
La adolescente armada sostuvo que la llevó a la escuela para que supieran que «en su casa ella se encuentra en peligro». No obstante, el mismo día que otra de sus compañeras dio la voz de alerta, trascendió que llegó a su casa llorando porque al salir de la escuela, la joven del arma (en compañía de otra adolescente haitiana,) la habría amenazado y además enviándole un funesto mensaje a su madre en el entendido de que «si ella (la madre) va de nuevo a la escuela, le iba a dar cinco tiros en la cabeza».
Dado el hecho de que no existe una cultura de este tipo de sucesos en escuelas de República Dominicana, se hace imperativo tomar medidas inmediatas en aspectos de seguridad en planteles escolares.
Armas de fuego en escuelas
presencia de armas de fuego en las escuelas es un tema complejo y polémico. Por un lado, algunos argumentan que la posibilidad de tener armas en las escuelas puede ayudar a proteger a los estudiantes y personal del plantel de amenazas violentas. Por otro lado, muchos creen que las armas en las escuelas aumentan el riesgo de accidentes, violencia y disturbios.
Argumentos en contra
•Aumento del riesgo de accidentes: La presencia de armas de fuego aumenta la posibilidad de accidentes, incluyendo disparos accidentales o intencionales.
•Mayor riesgo de violencia: Algunos estudios sugieren que la presencia de armas de fuego en las escuelas puede aumentar la probabilidad de violencia, tanto dentro como fuera del plantel.
•Efecto psicológico en los estudiantes: La presencia de armas puede generar un ambiente de miedo e inseguridad en los estudiantes, afectando su bienestar emocional y psicológico.
•Dificultad para controlar el uso de armas: En las escuelas, es difícil garantizar que las armas sean utilizadas de manera responsable y segura.
•Impacto en la cultura escolar: La presencia de armas de fuego puede generar una cultura más militarizada en las escuelas, lo que puede no ser deseable.
Alternativas a la presencia de armas en las escuelas
•Mayor seguridad: La inversión en sistemas de seguridad, como cámaras de vigilancia, alarmas y personal de seguridad capacitado, puede mejorar la protección de las escuelas sin necesidad de armas.
•Mejora de la salud mental: El apoyo a la salud mental de los estudiantes y el personal, así como la prevención de la violencia en las escuelas, son medidas importantes para crear un ambiente seguro y saludable.
•Fomento de la comunicación: El diálogo y la resolución pacífica de conflictos son herramientas esenciales para prevenir la violencia en las escuelas.
Controversial argumentos a favor
•Protección de estudiantes y personal: Algunos defienden la idea de que tener armas en las escuelas, especialmente para personal autorizado y capacitado, puede permitir una respuesta rápida y eficaz a ataques armados.
•Disuasión de agresores: La presencia de armas de fuego puede actuar como disuasivo para posibles agresores, según este argumento.
